Según la coordinadora de este programa, con recolectar y separar estos desechos se aporta a la compra del medicamento de muchos jóvenes con discapacidad que laboran de diferentes formas en este lugar.
A su vez insta a niños y niñas de las diferentes escuelas a participar de esta celebración a través de una manualidad que puede ser premiada el próximo 22 de Junio.
Es un gran aporte al medio ambiente que está cambiando tanto, y es un buen aprendizaje para la juventud encargada de seleccionar los desechos que se transforman en cosas bonitas que luego son vendidos a precios módicos para invertir en su salud finaliza diciendo Zoraida Morazán.