Entre los nicaragüenses varados en la frontera de Nicaragua y Costa Rica, también hay familias matagalpinas

Nicaragüenses que se encuentran varados en la frontera sur de Nicaragua, están pasando por una difícil situación así lo dio a conocer el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca +

En una visita realizada por defensores de derechos humanos del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca +, en la frontera de Peñas Blancas, se constató la difícil situación que atraviesan decenas de familias nicaragüenses, entre estas hay familias matagalpinas que intentan regresar a tierra pinolera.

“Nos encontramos con matagalpinos que se encuentran en esta situación inhumana, a cualquier nicaragüense le duele lo que se está viviendo acá”, describió el abogado matagalpino Yáder Valdivia, defensor de derechos humanos.

Valdivia comenta que hay distintos relatos de las familias afectadas en la frontera con Costa Rica, «las personas matagalpinas han expresado que se quedaron sin trabajo por eso decidieron retornar a Nicaragua y ahora se encuentran con esta noticia, que no pueden retornar».

Los defensores de derechos humanos radicados en Costa Rica, también conocieron que en el sector donde están decenas de nicas varados por la crisis sanitaria, se registran altercados y la policía agredió a un ciudadano nicaragüense porque no hay autorización de utilizar un baño que fue habilitado para más de 500 personas.

“Las condiciones son inhumanas, violatorias a los derechos humanos, estamos haciendo las gestiones al más alto nivel, denunciando estas graves violaciones a derechos”, reveló Valdivia. Es una grave crisis humanitaria, la gente sigue llegando y es posible que el número de nicas migrantes aumente.

El Colectivo Nicaragua Nunca + y el Instituto de Liderazgo de las Segovias, hizo un llamado urgente y exhortó a la comunidad internacional, a estados miembros del SICA (Sistema de Integración Centroamericana) y en particular al estado de Nicaragua para que adopte las medidas necesarias para suprimir los obstáculos que impiden el ingreso las y los nicaragüenses que exigen se respete sus derechos humanos.

Mientras eso sucede en la frontera de Nicaragua con Costa Rica, Daniel Ortega envió antimotines a Peñas Blancas para evitar que las personas que se encuentran varados desde unos tres días ingresen al país.

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Por su parte, el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH) denunció el actuar represivo de Ortega. “En estos momentos CENIDH recibió información sobre llegada de fuerzas armadas a Peñas Blancas para evitar que los 150 nicaragüenses varados en la frontera ingresen a Nicaragua”, alertó el organismo en Twitter.

Además, el CENIDH informó que el gobierno pide a los nicaragüenses una prueba del COVID-19 negativa como requisito para el ingreso, por lo que demandó que este realice los testeos y deje entrar a las personas a su país.

Aunque se habla de 150 nicaragüenses, el medio costarricense La Cruz TV de Guanacaste contabiliza hasta 400 personas que se encuentran en el lugar a la espera que el gobierno le permita el ingreso a su propio país.

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