Nicaragua enfrenta crisis sanitaria y económica
Nicaragua no cuenta con una política de estado para prevenir el COVID-19, las medidas se han tomado a nivel individual y esto implica reducciones en las actividades económicas.
Radio Vos
4:15 pm
30/07/2020
Matagalpa, Nicaragua
Nicaragua enfrenta una crisis sanitaria y económica porque en todos los países ha habido confinamiento o cierta restricción en la movilización, esto implica una menor actividad económica en algunos países y en otros una cuarentena total que significa restricción de movilización y actividad económica total, así lo explica el economista del Centro Humboldt, Javier Mejía.
Según el especialista, Nicaragua no cuenta con una política de estado para prevenir el COVID-19, las medidas se han tomado a nivel individual y esto implica reducciones en las actividades económicas, que ya vienen causando efecto en las y los trabajadores de diferentes sectores de la economía nicaragüense.
«En el caso de Nicaragua no ha sido tan impactante como en otros países, sin embargo, la población y gran parte del sector privado a tomado sus medidas de autocuido, y esto ha implicado una reducción de la actividad económica, sumado a esto, las exportaciones o la movilización no se esta dado con normalidad, porque los otros países si están tomando medidas, la pandemia ha implicado restricción, disminución de actividad económica, por ende a habido una reducción de salario para quienes conservan su empleo y desempleo en las empresas que no pudieron seguir manteniendo a todo su personal, esto a desencadenado mayores niveles de pobreza en el país», explica el especialista.
La actividad agrícola según el indice mensual de actividad económica que presenta el Banco Central, disminuyó en el 0.6% y la actividad pecuaria disminuyó 3.4%, «actividades importantes para la economía nicaragüense están disminuyendo su generación de ingresos, y no se diga los sectores mucho más afectados como hoteles y restaurantes que han disminuido hasta 56%, esto a implicado un golpe fuerte a la economía», detalla Mejía.
El especialista también destaca la reducción de ingresos por remesas, ya que estas personas que enviaban remesas están en países con cuarentena obligatoria donde se les dificulta trabajar y así poder enviar dinero a sus seres queridos, un rubro que dinamizaba la economía del país.
«Teníamos una economía que ya venía golpeada del 2018, eso nos diferencia mucho del resto de países de la región, una economía negativa, a Costa Rica, El Salvador, Guatemala no los agarro con números negativos, pero nosotros seguimos en una crisis sociopolítica que tuvo y tiene efectos fuertes en la economía, entonces nos agarro mucho más complicado», expresa el especialista.
Además agrega que no contar con una política de respaldo económico para los sectores vulnerables, y que todo siga en la normalidad, reduce la actividad económica y la gente tiene menos ingresos o no tiene ingresos porque perdieron sus empleos.
«Al corto plazo ya se ve una disminución de las pequeñas y medianas empresas, podría ser, si las cosas siguen complicadas afectar a grandes empresas, y decidan cerrar operaciones definitivamente, y ya vemos un incremento de mucha actividad informal, cuando se ven que las actividades informales están empezando a crecer en un país, eso significa que el sector formal esta sacando a sus empleados, y la gente incurre en estas actividades informales que los pone en riesgo de contagio», manifiesta Mejía.
Como economista recomienda que deberían de tomarse medidas inmediatas, como una política de estado de asistencia económica a las actividades que han sido más golpeadas por la crisis, y revisar las actividades económicas que podrían dinamizar nuevamente la economía, además de implementar un subsidio para los servicios básicos y poder apoyar a la gente con menos ingresos o que no tienen ingresos.
Los diferentes sectores deberán reunirse y tomar en cuenta las medidas adecuadas para evitar un aumento de casos de COVID-19, y así los efectos podrían ser menos dañinos en la economía nicaragüense, la esperanza es que se logre parar la pandemia y evitar que la economía caiga aún más.
