Aprendí a convivir con mi discapacidad, sola
“Aprendí a convivir con mi discapacidad, sola” la historia de la matagalpina Estela Bernarda García López
Radio Vos
12:23 pm
26/08/2020
Matagalpa, Nicaragua
“Aprendí a convivir con mi discapacidad, sola” con seguridad y confianza se expresa Estela Bernarda García López de 32 años, cuenta que desde que nació tiene problemas para caminar y por la falta de recursos no puede ser atendida por un especialista. Estela No quiso ser una carga para su familia y desde hace siete años decidió que el atrio principal de la catedral de Matagalpa se convertiría en su segundo hogar.
La matagalpina es originaria del barrio El Tambor al este de la ciudad de Matagalpa a 10 minutos de la catedral San Pedro apóstol. Ella baja todos los días caminado despacio con dificultad, con su silla de ruedas y algunas cosas como su paraguas para medio cubrirse del sol y la lluvia y un galón para el agua, no utiliza el transporte público menos un taxi porque no tiene como pagarlo.
Por esta situación de escasez de recursos económico decidió pedir y asentarse en este lugar, el atrio del templo, porque no se siente con fuerza ni energías para recorrer las calles y pedir «yo no quise ser carga de mi madre decidí luchar sola», comenta García López.
Ella sobrevive de la colaboración de la gente que pasa por el lugar donde se sienta y le dan billetes de 10 o 20 córdobas, eso le ayuda para alimentarse, pero no es suficiente para subsistir; hay momentos que pide en algunos lugares y le dan comida o le llegan a dejar al sitio. Explica que sabe hacer muchas cosas pero su capacidad para discernir y resolver los problemas le ayuda para vivir «muchos dicen que los discapacitados son un estorbo, pero uno vive de su manera de pensar».
Cuenta la mujer que, no tuvo la oportunidad de ir a la escuela porque su mamá no podía llevarla, no había quien la cuidara ni la atendiera, pero siempre quiso aprender manualidades que era lo que podía hacer por su condición. Sin embargo observaba que las personas no aprecian ni valoran lo que hacen las personas con discapacidad eso la desmotivó a crear estos artículos.
Estela es una mujer humilde, cariñosa, agradece cada córdoba que recibe, pero a veces se entristece y se enoja porque hay personas que no le ayudan más bien la irrespetan. La mujer llega todas las mañanas al atrio y espera que las personas le cooperen, hay momentos que se siente insegura ya que los comerciantes que están a su alrededor la discriminan y la maltratan «a veces vienen personas a discriminar y esas personas deberían respetar», enfatiza.
Con la llegada de la crisis sanitaria del nuevo coronavirus que enfrenta el mundo surgieron medidas para prevenirlo, Estela al igual que muchas personas en Nicaragua no tiene posibilidades de comprar ni siquiera una mascarilla, esto no le preocupa, cuenta, porque ya aprendió a convivir con tantos problemas a lo largo de estos siete años en la calle.
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Estela se ha ganado el cariño y afecto de algunas personas que, así como ellas utilizan el atrio para estar y conseguir tranquilidad. Un joven que la visita constantemente expresa que ella es una de las personas más importante de este lugar «ella es una persona que no niega su cariño, si uno necesita hablar con alguien ella brinda sus consejos», comenta el joven.
Estela es una de muchas personas con discapacidad que sobreviven de la caridad de otras personas en las calles de Matagalpa en la mayoría de los casos no tienen familia, son de bajos recursos económicos o son despreciados en sus hogares. Sin embargo “en la mayoría del tiempo reciben maltrato, humillación y desprecio”, así lo comenta en su testimonio.
Cada 25 de agosto se conmemora el Día Nacional de las Personas con Discapacidad en Nicaragua, según la ley 763, Ley de los Derechos de las Persona con Discapacidad se promueve el respeto, los derechos, el acceso, la eliminación de los prejuicios de estas personas.
