Los viveros y jardines comunitarios de un emprendedor jinotegano

Desde adolescente Miguel Zelaya comenzó a coleccionar plantas, era su sueño, tiempo después y con mucho esfuerzo el joven decidió emprender en su vivero
Vivero-comunitario-en-Jinotega
Radio Vos
4:34 pm
21/05/2021
Matagalpa, Nicaragua

Para Miguel Iván Zelaya Castro, la vida le ha sido dura, complicada y “de todo un poco”, pues uno de los mayores obstáculos de sobrevivencia para un ser humano, es el dinero, peor cuando nos referimos a Nicaragua, un país con la tasa de desempleo más grande de Centroamérica y ahogado en una crisis económica.

Viveros-comunitarios-en-Jinotega
Plantas que oferta Miguel Iván Zelaya Castro

Zelaya Castro, vive en la comunidad Santa Cruz, de Pantasma en Jinotega, al norte de Nicaragua, piensa conseguir ingresos a través de proyectos como el de un vivero comunitario que ha nombrado “Viveros El Shaddai” para estudiar ingeniería agro-industrial, pues apenas logró culminar su quinto año de secundaria.

Con las manos llenas de tierra, botas de hule y ropa sucia, Zelaya Castro empezó a los trece años a ganarse la vida vendiendo plátanos, con esos ingresos compró un solar, y más tarde consiguió negociar veinte manzanas de terreno que ahora trabaja.

El joven siguió emprendiendo aventurándose en varios negocios como la producción y venta de plátanos, y crianza de ganado. Incluso ha hecho trabajos como electricista, fontanero y ordeñador de vacas. Al día de hoy, tiene 25 años, y sigue auto superándose con otro proyecto innovador como la producción, venta y realización de diversos viveros caseros con gran variedad de plantas. Pese a que hace un año, estuvo hospitalizado pues es sobreviviente de Aneurisma cerebral.

A Zelaya Castro nadie le enseñó a trabajar la tierra para producir y cosechar plantas, solo quiso aprender, y lo logró de manera empírica, “siempre lo intentaba una y otra vez” recalca, hasta que logró producir.

Una de sus tantas experiencias y quizás la más difícil como hacedor de jardines, fue cuando tuvo que levantar hierba verde en un terreno súper árido “era como un diamante en bruto” recuerda. Escarbó como dos metros de profundidad, sacó bastante piedra y al final logró preparar el terreno para que la planta sembrada prosperara.

Puede leer: Artista matagalpino encuentra oportunidad para cumplir sus sueños

Viveros el Paraíso, también es otro negocio que ha trabajado el joven durante cuatro años, el resultado es asombroso y está ubicado en Quilalí, Nueva Segovia.

Miguel Iván Zelaya Castro tiene sus propias convicciones de superación. Es el único varón de los tres hijos de Angélica María Castro Rodríguez y Miguel Ángel Zelaya, habitantes jinoteganos.

Durante los años, el joven se ha conectado con personas de varios sitios del país, y su pequeño proyecto ha logrado ser reconocido por la delicadez, trato y dedicación que les da. Ese impulso lo ha llevado a meterse en la cabeza la idea de crear una finca de verano agro-turístico que cuente con viveros y crianza de peces.


Para que nuestra voz y tu voz se siga escuchando,
apoya nuestra labor comunitaria.

DONA AQUÍ

noticias relacionadas

Pobreza en Nicaragua podría incrementar hasta en un 36.9% este año

Sector ganadero de Nicaragua afectado por cambio climático y altos costos de producción

Migrante de Quilalí fallece en accidente de tránsito en USA

Matagalpa de luto por accidentes de tránsito: Pérdidas lamentables en la comunidad