Poca oportunidad laboral para mujeres exiliadas
A pesar del exilio las mujeres han demostrado que sí, se puede salir adelante y el emprendimiento ha sido una de sus herramientas
La situación laboral está difícil para la mayoría de las personas nicaragüenses, pero no son más fáciles para las personas que migran debido a que no cuentan con documentos legales que mejore su situación a pesar de que en otros países si hay empleo.
Las mujeres exiliadas en Costa Rica han venido reinventándose nuevas maneras de obtener ingresos económicos para llevar el sustento a sus hogares.
Alejandra Úbeda es una matagalpina exiliada y una emprendedora en tema de gastronomía, porque, aunque cuenta con una carrera profesional no la puede desempeñar en este país.
«Somos mujeres profesionales que este exilio nos ha dejado sin ejercer nuestra profesión y como todos los nicaragüenses sabemos que el trabajo es digno y que no hay otra mejor manera de subsistir que trabajando, pues me decidí hacer lo que me gusta hacer cocinar».
A pesar del exilio las mujeres han demostrado que sí, se puede salir adelante y el emprendimiento ha sido una de sus herramientas ya que han utilizado lo que saben hacer y utilizan lo que tiene a su alcance para emprender.
Ruth Blass es otra mujer nicaragüense exiliada en Costa Rica, ahora se dedica a elaborar diferentes artículos, como bolsos, adornos, llaveros, todos estos, tejidos a base de lana.
La necesidad de obtener recursos económicos la ha llevado a poner en práctica lo que ya sabía hacer en Nicaragua. Ruth dice «Aquí en este país a pesar de que somos profesionales, aquí no podemos ejercer nuestra profesión, entonces tenemos que buscar una manera de generar ingresos para poder solventar las necesidades básicas».
Las mujeres son un ejemplo de lucha, resiliencia y capacidad para crear alternativas de sobrevivencia para ellas y sus familias y aunque aún no cuentan con empleo formal no pierden la esperanza de poder obtenerlo.