Madres e hijas sanando juntas las heridas de la violencia, es el título de la sistematización que recoge la experiencia de un proceso de acompañamiento emocional que el grupo Venancias llevó a cabo con madres de niñas y adolescentes de abuso sexual en la Dalia, Municipio de Matagalpa.
Ruth Marina Matamoros presentó la sistematización y habla sobre la importancia de trabajar con las madres de sobrevivientes.
Entrevista: Ruth importancia (1.18)
Hicieron grupos de terapias para las madres y otro grupo para las víctimas directas de la violencia sexual.
En total fueron 14 sesiones, de 2 encuentros por días.
Matamoros dice que trabajar con las madres que son víctimas indirectas del abuso sexual tiene beneficios que ayudarán a las niñas y adolescentes en su proceso de sanación, sobre todo para quienes tienen que enfrentar a los violadores y abusadores sexuales en juicio.
Entrevista: Ruth Beneficios (1.17)
La Segunda etapa se dirigió a que las mujeres se identificaran con su género, a aprender sobre sus derechos y los de sus hijas, a saber que los estereotipos de géneros les llevan a ser víctimas del machismo.
Para apoyar a las mujeres en la búsqueda de su fuerza interior, también realizaron una sesión de defensa personal.
Sanar las heridas de la violencia sexual lleva tiempo. El primer paso es nombrar lo ocurrido y responsabilizar a los agresores sexuales y no culpar a las víctimas.
Entrevista: Ruth Culpabilización (1.02)
Liberarse de la culpa impuesta e injusta les permitió hacer planes y proyectos para re encaminar su futuro como mujeres sujetas de derechos.
La experiencia fue compartida con estudiantes de las carreras de sicología y sociología de la Universidad del Norte de Nicaragua.
Helen Villareina, fundación entre mujeres de Estelí opinó.
Por su parte el Licenciado Erick Rivas, coordinador de la carrera de humanidades de la UNN, menciona que todas las personas deben actuar en contra de la violencia sexual.
Igual que en los femicidios, los agresores sexuales, son en su mayoría personas conocidas o que viven cercanos a las víctimas.
Por eso es necesario nombrar el delito y poner a luz los datos de los agresores para evitar que continúen haciendo más daños e impunes. Pero también que la población actuemos en la prevención y sanción de la violencia.