La ley 779, ley integral contra la violencia hacia la mujer prohíbe la mediación. Las especialistas en la atención a víctimas entienden que mediar con los agresores solo deja en mayor inseguridad y desventajas a las personas que viven violencia.
A pesar de ello, en la policía nacional, influyen para que las mujeres lleguen a acuerdos con los hombres que las violentan, lejos de cumplir con su deber de capturar a los agresores para garantizar los derechos de las mujeres.
Algunas mujeres aceptan mediar porque no conocen la ley y se les hace creer que estarán segura.
Pero no son las únicas que desconocen la ley y lo que significa la mediación. Hicimos varias entrevistas en la calle a diferentes personas para preguntarles ¿que saben de la mediación?
Quienes por experiencia propias han mediado, saben que este recurso legal no pone fin a la violencia.
Un poblador encuestado también se mostró en contra de la mediación y nos dice por qué.
Es importante que las mujeres sepan que no están obligadas a mediar con los agresores.
La policía debe escribir la denuncia e investigar.
El código de la familia establece que se puede mediar en delitos leves que pueden ser conflictos vecinales y otros donde no está en riesgo la vida de las personas.
En delitos de violencia la mediación solo sirve para darles mayor ventaja a los delincuentes para que cometan femicidios.