Beneficiarias de las tunas demandan financiamiento.
Mayra Peralta miembra de la junta directiva y coordinadora del comité de agua de la comunidad Nuestra Tierra, lleva 11 años de estar viviendo en esta comunidad que nace de las luchas […]
Mayra Peralta miembra de la junta directiva y coordinadora del comité de agua de la comunidad Nuestra Tierra, lleva 11 años de estar viviendo en esta comunidad que nace de las luchas conocidas como las TUNAS, que tuvo una duración de cinco años en Nicaragua.
En el lugar habitan 110 familias que sobreviven de la siembra de maíz, frijoles, yuca, y principalmente del café, las mujeres tienen a su nombre de dos a tres manzanas de tierra que han ido vendiendo poco a poco impulsadas por la situación económica.
Peralta como líder comunitaria repudia la venta de estos terrenos que son muy productivos y reconoce que el gobierno se comprometió a darles el financiamiento necesario para producir, sin tener que deshacerse de lo que tienen.
Ante esta situación Radio Vos visito esta comunidad, allí conversamos con Doña Leónidas Jarquin, ella dice que se vio obligada a vender tres manzanas que poseía porque no encontró apoyo para cultivar la tierra.
Entrevista. Doña Leónidas Jarquin
Otra mujer que se arriesgó a vender un pedazo de tierra fue doña Meibi Pravia, quien asegura que lo hizo para unificar sus tierras, y reconoce la falta de financiamiento para producir.
Doña Francisca Martínez expresa que la demanda ante el gobierno es real y ya se han hecho algunos planteamientos pero no hay respuesta.
Entrevista. Francisca Martínez
Como madres de familia estamos muy preocupadas dice Doña Doris Rodríguez quien asegura que esto también provoca la migración de la gente joven.
Las haciendas están de 2 a 3 horas de camino, y les pagan 120 córdobas el día incluyendo la comida, la jornada laboral inicia a las seis de la mañana y termina a las cinco de la tarde, según las comunitarias.
Las entrevistadas hacen públicas su demanda para encontrar soluciones y producir la tierra sin necesidad de vender, así también evitar la migración de la gente joven que demanda un empleo digno para seguir sus estudios.