El 26 de marzo, en el municipio de Matiguas, departamento de Matagalpa, se reportaron varias muertes de monos congos. Estos animales caían de los árboles junto con sus crías, lo que causó conmoción entre los habitantes locales, quienes afirman que los primates no resistieron el calor y la falta de agua.
Los pobladores lanzaron una alerta a través de las redes sociales y proporcionaron botellas de agua para calmar la sed de los animales que se arrastraban por el suelo. Además, el cuerpo de bomberos llegó al lugar con cisternas para lanzar agua hasta la cumbre de los árboles y así hidratar a los monos.
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Ambientalistas locales explican que los monos congos estaban deshidratados y lamentan la situación, señalando la escasez de refugios para los animales debido al calor sofocante, la deforestación y la disminución del agua en la zona. Los primates solían habitar en las riberas de los ríos Bull Bull y Jobo y fueron encontrados agonizando cerca de la carretera.
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Tras la difusión de la noticia, la comunidad se movilizó para dejar agua limpia y comida en lugares accesibles para los animales. Sin embargo, surge la pregunta sobre las posibles causas de las muertes: ¿se deben a las altas temperaturas, la falta de agua, enfermedades o envenenamiento?
El Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria (IPSA) y el Ministerio de Salud (MINSA) se han comprometido a investigar las causas exactas de las muertes de los monos congos. Asimismo, los líderes comunitarios han instado a la población a unirse a planes de reforestación y conservación de recursos hídricos para crear ambientes más favorables para la vida silvestre y evitar tragedias similares en el futuro.