Seis años ratificados contra femicida de locutora Jinotegana
En Nicaragua según la ley 779 estos delitos de femicidios son catalogados como crímenes de odio que se castigan con 30 años de cárcel que es la pena máxima
Justo Pastor Ortiz de 17 años de edad, en abril del año 2021 fue sentenciado a 6 años años de cárcel tras ser encontrado culpable por el delito de femicidio en perjuicio de su novia la locutora Jinotegana Britney Olivas Herrera de 17 años quien estaba en estado de embarazo.
El abogado defensor del detenido realizó gestiones con el fin de encontrar una reducción de pena para beneficiar al adolescente con la reducción de 2 años de cárcel, el fin era que cumpliera cuatro años de condena y tres de ellos fueran asistidos, es decir libertad condicional para que el joven siguiera con sus estudios universitarios y gozara de otros beneficios.
El femicida originario de Estelí cuando cometió el crimen cursaba el primer año de ingeniería civil, y según las investigaciones se negó a que Olivas continuara con el embarazo, sin embargo, la joven quería seguir con su embarazo lo que provocó la ira del femicida que planificó una salida para arrebatarle la vida.
El acusado en una audiencia admitió los hechos, la Jueza María Elsa Laguna ordenó tratamiento psicoterapéutico, medidas de prevención, terapias grupales y familiares, control de ira entre otras recomendaciones tomando en cuenta que tiene 17 años y solo cumplirá 6 en la cárcel, lo que indica que saldrá de 23 años a reincorporarse nuevamente a una vida social con toda libertad.
En Nicaragua según la ley 779 estos delitos de femicidios son catalogados como crímenes de odio que se castigan con 30 años de cárcel que es la pena máxima y dependiendo del caso, la cadena perpetua, por tratarse de un adolescente de 17 años protegido por el Código de la Niñez y Adolescencia ha tenido un trato diferenciado y la pena máxima en su caso es de 6 años de prisión.
A través de una resolución emitida por el tribunal se ha ratificado que Ortiz deberá cumplir los seis años de cárcel que se le ordenaron, al mismo tiempo debe integrarse a algunas labores sociales en el penal a como se indica en la primera sentencia.
Britney Olivas, perteneció de manera activa al club infantil de Jinotega donde se destacó por defender los derechos de niñez y adolescencia, su sueño era llegar a ser una gran periodista.