Costa Rica reconoce derecho de educación a niñez migrante

Lo más difícil que enfrentan cuando ingresan al país es la situación económica, con la ventaja que a cada niño o niña se le brinda ayuda económica

Desde el 2018 mil de familias nicaragüenses se han visto obligadas a salir del país por diferentes situaciones, entre ellas las económicas. El principal país destino ha sido Costa Rica debido a la cercanía y las facilidades para cruzar.

Cuando las familias migrantes llegan a Costa Rica tienen la obligación de inscribir a la niñez en el centro de estudio más cercano a su localidad, estas matrículas se pueden realizar, aunque no tenga documentos legales, en estos casos el Ministerio de Educación asignará un número de expediente.

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Clara Mena hace cinco años migró hacia Costa Rica con su hijo de cinco años de edad, ella cuenta cómo ha sido este proceso, «cuando vine me dijeron que tenía que matricular al niño para kínder el proceso fue rápido y ahora mi hijo está en cuarto grado, además aquí la educación es gratuita y hasta te pueden demandar si no mandas a los niños a clase».

A diferencia de Nicaragua en Costa Rica el curso lectivo engloba del segundo lunes de febrero al último viernes de noviembre, está dividido en tres trimestres y cuenta con dos semanas de descanso en el mes de julio.

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Según el Artículo 50 del reglamento de centros educativos cada estudiante conservará esta categoría mientras no sea retirado por voluntad de sus padres antes de finalizar el periodo de lecciones, es decir que la madre y el padre de familia no pueden retirar a sus hijos e hijas de clases sin finalizar el ciclo escolar.

Lo más difícil de realizar el proceso

Lo más difícil que enfrentan cuando ingresan al país es la situación económica, con la ventaja que a cada niño o niña se le brinda ayuda económica y se les facilita artículos escolares para que no tengan que abandonar las aulas de clases.

Continúa explicando Clara, «lo más difícil para mí al momento de matricular a mi hijo en este país fue tener a mano toda la papelería y alistarse con su uniforme y sus útiles escolares porque yo estaba recién llegada y no tenía trabajo, pero en la escuela le consiguieron todos sus útiles».

Cabe mencionar que cuando la niñez ya ha recibido clases en su país de origen, se realizan pruebas para conocer su nivelación académica y así colocarles en el grado más adecuado a su nivel de conocimientos.

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